5 cosas a tener en cuenta para reformar tu restaurante
Si llevas ya algún tiempo con tu restaurante puede que el menú, la decoración, el mobiliario e, incluso, la carta estén empezando a quedar aburridas y obsoletas. No dejes que esto ocurra y dedica una parte de tus ganancias para reformar tu restaurante. A veces, con solo cambiar un poco la apariencia del lugar, bastará para que el negocio despegue de nuevo.
Reformar tu restaurante es justo lo que necesitas
A veces, reformar tu restaurante es justo lo que necesitas para recuperar su rentabilidad. Obviamente, pensar en reformar tu negocio puede sonar muy arriesgado. Es costoso, consume mucho tiempo y puede provocar un cambio en la percepción de tus clientes habituales. Esto es lo que debes tener en cuenta a la hora de decidir qué tipo de reforma llevar a cabo.
Averigua lo que tus clientes opinan
Tu clientela es el recurso más valioso de que dispones para saber cómo necesitas enfocar la reforma. Usa la opinión de tus clientes para crearte una imagen de lo que necesitas cambiar y ofrecerles lo que están buscando. Una forma fácil de hacerlo es lanzar un test o cuestionario en las redes sociales. Pregunta a tus clientes habituales qué cambiarían ellos de tu negocio, desde el color de las paredes hasta la presentación de los platos.
Observa a tus clientes, escucha sus sugerencias, recopila todos los datos y opiniones que puedas y, en base a toda esa información, crea un plan de reforma. Una vez tengas claras todas las ideas y cambios que quieres llevar a cabo, consulta con un profesional para que te dé una idea realista basada en tu presupuesto, y en las capacidades de cambio del local.
Toma en consideración el diseño
La logística es una parte vital del éxito de un restaurante. Sería bueno que tuvieras en cuenta las siguientes preguntas:
- ¿El acceso a tu restaurante es fácil? Es decir, las dimensiones de la puerta de entrada, si hay barreras arquitectónicas, escalones, objetos que dificultan el acceso, etc.
- ¿Dispones de todo lo necesario para que el restaurante sea accesible para todos? Es decir, ¿está el establecimiento preparado para facilitar el acceso a personas con movilidad reducida, o dificultades motoras?
- ¿Están las entradas, salidas, así como los lavabos, bien señalizados de manera que puedan localizarse fácilmente?
- ¿La disposición de las mesas, sillas y demás mobiliario es el adecuado para acoger a todos los clientes cuando el restaurante está lleno?
En cuanto a tus empleados:
- ¿Disponen del espacio suficiente para servir los platos de manera rápida y fácilmente?
- ¿Disponen de la distribución adecuada para poder preparar, cocinar y limpiar de manera fácil?
- ¿Tienen los empleados un espacio para tomar descansos que no esté expuesta a los clientes?
- ¿Está la cocina distribuida de tal manera que facilita el trabajo y la entrada y salida de los empleados?
Una vez y hayas respondido a todas estas preguntas podrás diseñar una reforma efectiva del espacio, añadiendo al presupuesto la decoración o mejora de la imagen. De esta manera al terminar la renovación ganarás en eficiencia y calidad, lo cual se traducirá en la rentabilidad y el éxito esperados.